Estalló crisis económica en el Ayuntamiento capitalino

Al suspender la CFE el servicio de energía eléctrica en diversos espacios públicos, el jueves por la noche, finalmente, estalló la crisis económica largamente larvada en el Ayuntamiento capitalino.
Pero el corte del servicio de alumbrado público en diversos sectores de la ciudad es, en realidad, la parte visible del nuevo diferendo entre el Ayuntamiento capitalino y el Gobierno del Estado.
Por alguna razón todavía no ventilada públicamente y que, por tanto, ignoramos, es por demás sabido que José Antonio Hernández Fraguas no está en el ánimo político de Ulises Ruiz Ortiz.
Ello explicaría presuntamente, también, que desde algunos sectores del propio PRI-gobierno se obstaculice y en algunos casos se ataque políticamente al hoy diputado electo del tricolor.
Esta realidad cobró diáfana claridad al no ser candidato del PRI a gobernador, no obstante ser supuestamente la “aspirina” mejor posicionada en las diferentes encuestas preelectorales.
Realidad que se fortaleció al no ser, tampoco, coordinador de la fracción del PRI en la próxima Legislatura “por no haber ganado en las urnas”, según el argumento opositor de Javier Villacaña.
En este sentido, el coordinador de la diputación federal oaxaqueña Eviel Pérez Magaña y el diputado local Martín Vásquez Villanueva, respectivamente, ganaron la mano a José Antonio.
A pesar de ser mecha corta, en todo momento, sin embargo, Hernández Fraguas ha mantenido la institucionalidad para evitar el escándalo público por el quebranto económico del Ayuntamiento.
Como es lógico y natural, los regidores de oposición convergente y panista en el Ayuntamiento, se le han ido a la yugular al presidente municipal priista con licencia y a los encargados del despacho.
El Gobierno Municipal, puntualizó a través del coordinador de Servicios Municipales, José Ángel Álvarez González, que el adeudo a la CFE se debe al retraso en la entrega de las participaciones.
El monto de las participaciones municipales no entregadas asciende a 120 millones de pesos, lo que permitiría al Ayuntamiento cubrir el adeudo de 11 millones a la CFE y a sus proveedores.
En tales condiciones, la solución a la crisis económica estallada públicamente en el Ayuntamiento capitalino es relativamente fácil de resolver, pues basta hacer la entrega de las participaciones.
Confiamos que con un poco de voluntad política para cubrir los 120 millones de pesos de participaciones al Municipio de Oaxaca de Juárez, todo se reducirá a una simple anécdota.
En caso contrario, las cosas se complicarán financiera y políticamente de manera innecesaria para el Ayuntamiento capitalino ante el incumplimiento en el pago de sus diversos proveedores.
De darse este último escenario, el nuevo diferendo entre el Ayuntamiento capitalino y el Gobierno del Estado se profundizará con declaraciones, acusaciones y descalificaciones de ambas partes.
De ocurrir esta situación, surgirá un nuevo escándalo político en el que las partes exhibirán públicamente sus pecados, con el consecuente deterioro de la imagen de la clase política priista.
Por tal motivo, es imperativo que los diferentes grupos y corrientes priistas limen sus asperezas internamente, en virtud de que tras su derrota la nueva realidad política cambió radicalmente.
Para evitar que se les siga convirtiendo en perros del mal, hoy más que nunca los priistas están obligados a privilegiar la unidad, la lealtad y la dignidad, de lo contrario, están perdidos.

director@diariodespertar.com.mx