Los medios o el contrapoder; inauguración de RC Multimedios

Alfredo Ramírez de Aguilar/Despertar

Más que interesantes los conceptos vertidos anoche en la inauguración de la empresa RC Multimedios, puesta en marcha por el político y comunicador Raúl Castellanos Hernández.
Acompañado de un grupo de profesionales de la comunicación y del periodismo, Raúl incursiona en la súpercarretera de la información con el más completo proyecto en prensa, radio y televisión.
Con modernas y lujosas instalaciones, ubicadas en el edificio Sarmiento, en la zona oriente de la próspera colonia Reforma, las pretensiones comunicacionales de Raúl son sumamente ambiciosas.
El contenido de su amplia programación, tipo revista, es sumamente variado y atractivo en sus diversas secciones y programas informativos, de análisis y debate, y de entretenimiento.
El político oaxaqueño que sentó a la mesa a sus amigos Luis Donaldo Colosio Murrieta y Manuel Camacho Solís, para limar asperezas, Luis Martínez Fernández del Campo, cortó el listón inaugural.
Afirmó que “el poder es algo más que comunicación y ésta es algo más que poder. El poder no puede controlar la comunicación porque los medios son el contrapoder que rompe dicho control”.
Esta aseveración es más que trascendente porque explica con toda claridad la trascendencia fundamental del papel estratégico que juegan hoy los medios de comunicación frente al poder.
No sin razón, El Pelirrojo, sostuvo que “el proceso de comunicación influye en la forma de construir las relaciones de poder en todos los campos sociales e incluso en la práctica política”.
Hoy el poder de la comunicación es solo una dimensión del poder político, ya que las relaciones son producto de una interacción compleja entre las diversas esferas de la actividad social”.
Ante los intereses y complicidades de los tres poderes erigidos constitucionalmente, no hay mayor valladar real que los medios de comunicación en la sociedad global como poderes fácticos.
De ahí, el permanente interés de los gobiernos y de otros poderes fácticos como el crimen organizado y el narcotráfico, particularmente, por lograr el control de los medios de comunicación.
Construida las más de las veces para garantizar la impunidad, la ingeniería constitucional de la mayoría de los países sólo tiene como contrapoder real a los diversos medios de comunicación.
Entre éstos, todavía hoy por hoy, siguen destacando los medios impresos, dada su permanencia y fácil accesibilidad, sin necesidad de contar o no con energía eléctrica para conocer su contenido.
Es de destacar que en la actual coyuntura de alternancia política, seguramente, surgirán próximamente una serie de medios y programas de radio y televisión. ¡Bienvenidos todos!
Confiamos que el profesionalismo de quienes los dirigen coadyuve a ensanchar el diálogo, los acuerdos y consensos para ensanchar las avenidas de la alternancia a la transición democrática.
Esperamos, asimismo, que sus patrocinadores o empresarios que incursionen en estos nuevos medios no se dejen tentar por el poder corruptor del lavado de dinero del crimen organizado.
Hoy en día, ésta es una realidad inocultable, toda vez que el crimen organizado y el narcotráfico requieren urgentemente de medios que defiendan sus negocios y cuenta con el dinero para ello.
No pasará mucho tiempo, sin embargo, para que a la luz del Sol muestren los móviles reales que les dieron nacimiento. No olvidemos que no se puede engañar a todos y menos todo el tiempo.
Afortunadamente, el pueblo oaxaqueño es sumamente sabio y sabrá desvelar las verdaderas intenciones de quienes pretendan deslumbrarles con el falso resplandor de cuentas de vidrio.

director@diariodespertar.com.mx